¿No me diréis que no os enamora este pastel? Yo lo tenía en pendientes desde hacía mucho, mucho tiempo. Así que qué mejor ocasión que mi Fiesta de los 40 para prepararlo. Aunque os que pueda parecer difícil, no se trata de una receta nada complicada. Yo saqué la RECETA del blog El Rincón de Bea, muy pero que muy recomendable. Se trata de preparar una masa de bizcocho que sea de color muy claro para que cuando la teñimos para hacer los colores de cada capa nos queden lo más reales posible. Como podéis ver le falta el color lila de la última capa (suerte que fue la última), tuvo un pequeño accidente que la dejó sin poder utilizar jejejeje .... pero no os preocupéis también nos la comimos jejeje .... Una vez preparadas las capas, unos días antes, las congelé hasta la noche antes de la fiesta que las dejé sobre el mármol para que se descongelaran naturalmente. Al día siguiente estaban perfectas como si fueran preparadas del mismo día.

Para rellenarlo escogí la nata. Así que, estrenando mi flamante Kidchen Aid, monté 800 gr. de nata a los que añadí dos cucharadas bien colmadas de queso fresco (tipo philadelphia). El queso hace que la nata coja una consistencia más dura y cremosa y no se baje. Y os puedo asegurar que en el gusto no se nota para nada. Una vez montada, rellené el pastel y lo cubrí. Para rellenarlo y cubrirlo Bea sigue un PROCEDIMIENTO que vale la pena ver, el resultado es muy satisfactorio. Y para terminar de decorarlo unas banderitas de colores ..... No hay que decorarlo demasiado por fuera para que luzca bien la sorpresa de colores de dentro, ¿no creéis?

Catieu