Whole Kitchen, en su propuesta para el Reto Dulce de este mes de septiembre, nos ha propuesto preparar un postre clásico británico: el Crumble.

Mira que no era la primera vez que oia hablar de él pero nunca me había picado la curiosidad de prepararlo. Quizás porque en casa tengo un alérgico a la mayoría de las frutas y los postres que llevan siempre las paso de largo. Pues, suerte que era uno de los retos. Qué delicia de pastel!!! Ya os puedo asegurar que no será la última vez que lo prepare. Me ha gustado mucho y a la que seguro que le encantará será a mi madre. El próximo será para ella.....

INGREDIENTES
Para el relleno de fruta:
* 4 ciruelas
* 2 cucharadas soperas de azúcar
* 30 gr. de mantequilla

Para la masa Crumble:
* 40 gr. de mantequilla fría
* 90 gr. de harina
* 25 gr. de azúcar moreno integral de caña y un poquito más
* una pizca de sal

PROCEDIMIENTO
Pelamos las ciruelas y las cortamos en cortes grandes. Las ponemos en un cazo al fuego junto con la mantequilla y el azúcar. Lo dejamos un ratito, removiendo, hasta que veamos que se van quedando más tiernas.
Las ponemos en el fondo del molde que queramos utilizar. Tienen que llenar toda la base.

Encendemos el horno a 200ºC.

Preparamos la masa de crumble cortando la mantequilla a cuadritos y mezclándola con el resto de ingredientes. Lo podemos hacer con las manos,, nos tiene que quedar una masa arenosa. Ahora la ponemos en el molde, encima de los trozos de fruta.

Ponemos el molde en el horno unos 20 minutos o hasta que veamos que la parte de arriba nos ha quedado tostada.

Es mejor comérselo un poco tibio. Pero vaya, quedó un trocito que me comí el día siguiente y todavía era delicioso....

Un pastel muy recomendable!!!

Catieu